Al
Capitán de la marina mercante
Don
Antonio Pérez –Reverte.
37 años en la mar
Eran
otros tiempos. Ahora cualquier imbécil puede llevar un barco a base de apretar
botones y con una terminal de satélite; pero entonces todavía quedábamos
hombres en los puentes, en cubierta y en los sollados. Hombres para palear
carbón empapados en sudor como en la boca del infierno, o pasar días con el
sextante en la mano, en mitad del Atlántico y con mal tiempo, acechando la
aparición del sol o de una estrella para determinar latitud y longitud sobre
una carta náutica. Hombres para destrozar un burdel en Rotterdam, secar un bar
en Tánger, o mantenerse al timón con olas de ocho metros y a la capa, mirando
al capitán silencioso y acodado junto a la bitácora como quien mira a Dios.
Leer completo en: La pasajera del San Carlos.
muy bien relatado, se nota que los años de mar le dan al hombre un don en el relato y en otras artes también, quiero compartir con ustedes este link que es un espacio dedicado en mi blog a la persona que me inspiro a ser marinero, todavía soy marinero de cubierta pero no me produce embargo pensar en ello, empece esta profesión hace poco y un poco tarde en mi vida, el mejor escalafón de mi vida es el de hoy en el mar.
ResponderEliminaraca les dejo el link espero les guste. http://melcalias.blogspot.com.ar/p/el-arte-en-las-manos-del-marinero.html
p/d: falta el link de seguidores, estaría bueno que lo agreguen.
Luis, primero que nada disculpa la demora en responder tus saludos.
ResponderEliminarLuego te agradezco los comentarios y sugerencias.
Por último recién hoy pude visitar tu excelente Blog. Esta bueno en contenido y en formato, además de ser útil para nuestra comunidad marítima.
Un abrazo fraternal.
Eduardo Canon.