El último viaje de la mayoría de los
grandes buques termina en Gadani a unos 50 Km de Karachi (Pakistán) o en Alang
(India), pero también hay algunos desguazaderos en África, Turquía en incluso
unos pocos en países europeos.
Continuamente hay en todos los mares del
mundo buques haciendo su último viaje. El último destino es el desguace.
Normalmente son viajes especiales porque en la mayoría de los casos se trata de
barcos en pésimas condiciones y esas navegaciones suelen ser complicadas cuando
no peligrosas. Los buques fondean en las cercanías de su ultimo puerto esperando
una marea extraordinaria que se repite periódicamente y cuando se da la misma,
ponen toda máquina hacia la playa y van a varar (y morir) en la misma.
Inmediatamente cientos de personas se
dedican a desarmarlo buscando rescatar la mayor cantidad de piezas posibles.
Muchas veces con materiales tóxicos donde suele abundar entre otros materiales,
amiantos de todos los colores. Algunos empresarios buscan determinados buques
porque por su origen podrán hacer negocios extraordinarios con los diferentes objetos
y materiales que podrán recuperar. Por la naturaleza del trabajo, el mismo esta
relegado a estos países además de la gran diferencia de costos respecto de
Europa.
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